Mi hermana consiguió trabajo haciendo visitas guiadas para colegios en el Museo de Ciencias Naturales. Ella tiene a su cargo la sala de Paleontología de Vertebrados, es decir, la de los dinosaurios. Al principio, le iban a dar la sala de los Antrópodos, donde están los insectos, ciempiés, arañas y cangrejos, pero apenas entró, se puso a gritar de tal manera que decidieron cambiarla. Mi hermana debió aprenderse un texto que le dieron en el Museo para contárselo a los niños. El texto describía la manera en que las primeras tortugas y los primeros lagartos aparecieron en el Triásico y los primeros ofidios en el Jurásico. Los dinosaurios, por su parte, poseen una antigüedad de 80, 100 y 150 millones de años. Sin embargo, por alguna razón, los mismos comenzaron a desaparecer antes del fin del período Cretácico y los paleontólogos no se han puesto aun de acuerdo sobre las posibles causas de esta extinción. Mi hermana me cuenta que a veces, cuando la maestra se va y ella se queda sola con los niños, inventa algunas partes del texto, como por ejemplo que los dinosaurios eran las mascotas de los extraterrestres, o que su desaparición se debió a que comieron hamburguesas envenenadas con gas mostaza o que, en realidad no desaparecieron sino que se ocultaron en el centro de la Tierra desde donde nos gobiernan a todos.